9 ene 2011

Que cruel que es la vida.

No me cansa que la gente no entienda lo que quiero o por qué lo quiero. Me enferma que no lo respeten. Idiotas, me chupa un huevo que no lo aprueben: voy a tener un gato macho y le voy a poner Alejandra. No necesito que me digan si está bien o no, si les gusta o no. Es mi decisión, y si al gato no le gusta, se irá.

No hay comentarios:

Publicar un comentario